Vietto está al caer

Luciano Vietto será jugador del Atlético en un plazo que en ningún caso debería exceder de las dos semanas. El acuerdo con el Villarreal está prácticamente cerrado después de que ambas entidades hayan mantenido un contacto permanente en las últimas jornadas, de modo que incluso desde el club amarillo se admite que el argentino vestirá la rojiblanca desde la próxima temporada.

Conocido es que la cláusula del punta es de 20 millones y que el Submarino apostó en el arranque de la negociación por el pago directo de esa cantidad, pero el Atlético intentó en todo momento alcanzar un acuerdo para evitar las cargas de una rescisión unilateral. La cantidad final del traspaso, así, podría incluso superar la marcada en el contrato, pero conviene matizar que el Villarreal ha mostrado interés por incluir algún jugador rojiblanco en la operación: la cesión del brasileño Leo Baptistao con opción de compra es la posibilidad que se contempla a día de hoy.

MARCA adelantó hace más de dos meses, concretamente el 28 de marzo, que el Atlético seguía a Vietto, que manejaba informes aconsejando su incorporación y que contaba ya con el visto bueno del propio Simeone, que había coincidido con su compatriota en Racing de Avellaneda. Posteriormente, el 26 de mayo se anunciaba que definitivamente era el elegido para reforzar la delantera, aunque todo pasaba por el acuerdo entre las partes. El paso que se le reclamaba al jugador, por cierto, llegó desde Australia, donde se cerró con una gira la temporada del equipo de Marcelino. “Si el Atlético paga la cláusula, todos ganamos”, dijo entonces Luciano.

Y es que la apuesta de Vietto por el Atlético ha sido firme desde el primer momento. Por eso ha sido posible que se alcance un acuerdo al que a día de hoy apenas resta un fleco, el que pasa por la cantidad que debe recibir Racing, equipo desde el que llegó al fútbol español hace una temporada y al que corresponde un porcentaje por un hipotético traspaso desde el Villarreal que está a punto de producirse.

Vietto, de hecho, manejaba otra oferta que por lo económico resultaba mucho más importante. Del Tottenham, concretamente, con el poderío financiero de la Premier detrás. Hubiera coincidido con otro compatriota como técnico, en este caso Mauricio Pochettino, pero él lo tuvo claro en todo momento y así se lo trasladó a su representante, Jorge Cysterpiller: si abandonaba el Villarreal, era para jugar en el Atlético.

El compromiso del delantero con el Atlético incluirá un mínimo de cinco campañas y permitirá que mejore notablemente los emolumentos que viene percibiendo en el Villarreal. La idea es que comience percibiendo un millón neto y termine en una cifra superior a los dos kilos. Si el rendimiento es el que se espera de un futbolista con 21 años y con una proyección enorme, parece evidente que la entidad del Manzanares tendría que revisar rápidamente su contrato. Tiempo habrá para eso, en todo caso.

“Habrá buenos fichajes... si nos dejan fichar”. La frase corresponde a Enrique Cerezo, pronunciada ayer mismo, y es que el Atlético sigue pendiente de una posible sanción de la FIFA por irregularidades en la contratación de menores. Como quiera que ese castigo podría pasar por la prohibición de inscribir nuevos jugadores y que, aunque la resolución está tomada, sigue sin llegar comunicación alguna, la planificación pasa necesariamente por un plan B en el que se mantendría el bloque actual y en el que futbolistas como Mandzukic o Raúl Jiménez tendrían que quedarse. A la espera de noticias, eso sí, se buscan refuerzos.